27 de diciembre de 2010

Se sabe lo que se deja, pero no lo que se encuentra.

Cuando las palabras no bastan, porque dentro quema algo que no se puede decir. Que no se consigue decir. Cuando quien tienes delante en lugar de darte la respuesta que querrías dice otra cosa. Dice mas, dice demasiado. Ese demasiado que es nada, que no sirve para nada. Y que hace el doble de daño. Y el único deseo es devolver ese dolor. Hacer daño. Esperando así sentirse mucho mejor..
-¿Sabes lo que pienso? No se lo que te habrá pasado, pero tu tienes miedo al amor.
-¿Miedo al amor yo? Si acaso miedo a encontrarme con una situación como la tuya. Ya no puedes pasar sin ello, te has acostumbrado. En realidad, te gustaría poder pasar, pero te da miedo.¡Tu eres la que tiene miedo! Y no al amor, sino a no saber estar sola, querida. Se sabe lo que se deja pero no lo que se encuentra...




No hay comentarios:

Publicar un comentario