Una tarde más, pensando en ti, como de costumbre. Apareces en mis pensamientos, otra vez, justamente cuando ya te daba por perdido y lo peor, cuando te daba por olvidando. Y tu vuelves, pisando fuerte, haciéndome sentir bien, querida, apoyada. La verdad, es que hace mucho que no estabas así, tan cariñoso, tan misterioso, tan enigmático. ¿Para qué mentirme? No me quito la idea de estar contigo de la cabeza, ni una sola vez. Pero...tampoco me quito el miedo de hacerme ilusiones, como me pasa siempre. Pero, ¿sabes qué? Esta vez voy a luchar por ti, sí, para demostrarte que yo puedo hacerte feliz, para que veas que no tienes por qué rayarte la cabeza, para que veas que yo, te quiero un mundo.
Te quiero, millones y más.
No hay comentarios:
Publicar un comentario