Desconfíar de todo y vivir de uno mismo.

Es increíble lo rápido que pueden llegar a cambiar las cosas en solo cuestión de unos pocos días. Te crees que vives en una burbuja, de la cual nadie te puede sacar de ella porque ahí vives la felicidad, tranquilidad y seguridad, dicho en todos los sentidos. Hasta que viene quien menos te lo esperas y la explota, y quedan solo las gotitas frágiles y débiles de lo que era. 

No sé que es lo que duele más, si la burbuja explotada o quien lo ha hecho. 

Lo que está claro es una cosa, no puedes vivir confiada, no puedes. Nunca vas a tener la seguridad de que vaya a ir todo bien, de que nada falle. Y tampoco puedes vivir confiando, eso muchísimo menos, ¿para qué? No tiene ningún sentido. Y ya sé que estoy lo estoy escribiendo con un cigarro en la mano y el móvil para escribir, como cierto modo de desahogo, ya que no puedo hacerlo de otra manera. 

Me gustaría que las cosas fuesen de distinta manera, que fuese todo como hace unos meses, hacía mucho que no lo pasaba tan mal. Y prometo que no hay momento que más me sincere conmigo misma que escribiendo esto, porque es así como lo veo, todo gris, de vez en cuando cae algun rayo de luz pero de repente, vuelve la tormenta y el chaparrón, y así como un jodido círculo vicioso que me come por dentro. 

Dicho esto, buenas noches para quien las tenga.